Salimos al bosque, paseamos y admiramos su gran belleza. Muchas veces escondida bajo la hojarasca, esperando la mirada curiosa de caminantes y recolectores.

De hecho, ya hace días que se encuentran setas en los bosques cercanos, y como en Sirem Wild nos encanta la naturaleza, también nos gusta visitar el bosque y usar nuestros cinco sentidos: disfrutar por ejemplo del gran número de ocres y marrones que presenta, del olor fresco a humedad, del ruido de nuestros pasos al pisar la hojarasca, del tacto tan especial de algunas setas, y como no, del sabor tan rico de algunas de ellas al comerlas.

Os invitamos a visitar vuestros bosques cercanos usando los cinco sentidos, siendo respetuosos con todo ya que es la única manera de disfrutar realmente:

• Siendo conscientes de la visión de tantos y tantos colores, verdes, ocres, dorados, naranjas, marrones, granates, rojizos…
• Prestando atención a todos los olores, de tierra, de humedad, de aire fresco, de hierba, de excrementos de animales, de flores…
• Escuchando el silencio, el viento, las plantas al mecerse, los pájaros, los roedores correteando, las hojas secas bajo nuestros pies…
• Tocándolo todo, la corteza de un árbol, la hierba mojada, las flores, los frutos y las setas…
• Y probando todo lo que conozcamos que es bueno y saludable, madroños, moras, fresas silvestres, setas…

En una de estas visitas al bosque es donde nos inspiramos para crear y diseñar nuestras camisetas. En esta ocasión hemos pintado en acuarela varias especies de setas comestibles que nos encanta recolectar y cocinar. Las podréis encontrar dentro de la colección Estaciones, en la que elegimos colores otroñales para los tejidos orgánicos de las camisetas, granates y morados.

Craterellus Cornucopioides es el nombre científico de esta apreciadísima seta.
Comúnmente llamada trompeta de la muerte, hay dos teorías que justifican su nombre:

• Una hace referencia a que esta seta sale alrededor de primeros de noviembre, recordemos que el día 1 de noviembre es el día de los muertos.
• La otra teoría dice que se llama así porque ¡está “de muerte”! Una forma de expresar su exquisitez.

Es muy apta para el secado y posterior consumo previa rehidratación.
De sabor potente nos lleva al bosque de nuevo al consumirla.
Os dejamos una receta fácil y de éxito asegurado.

Ingredientes:

• Un puñado de setas trompetas de la muerte (se puede hacer la misma receta con cualquier otra seta)
• Una cebolla pequeña
• Un chorro de aceite, sal y pimienta
• Chorrito de vino blanco
• Arroz tipo arborio
• Caldo de verduras o dado concentrado disuelto en agua
• Una cucharada de mantequilla
• Un puñado de queso rallado parmesano

Procedimiento:

1. Lavamos las setas bajo el agua corriente para eliminar restos de tierra y reservamos.
2. En una cazuela, tartera o sartén alta, sofreímos una cebolla pequeña finamente picada (o media si es grande) con un chorrito de aceite, añadimos la sal y la pimienta al gusto.
3. Una vez bien sofrita la cebolla, añadimos las setas también picadas y sofreímos un poco (dejar unas cuantas setas enteras que quedan muy bonitas).
4. Pasados unos minutos añadimos un chorrito de vino blanco y dejamos evaporar el alcohol.
5. Ya podemos añadir el arroz que removeremos bien durante unos minutos.
6. En una olla aparte tenemos caliente el caldo de verduras hecho por nosotras o el dado concentrado disuelto en agua.
7. Añadimos dos cazos de caldo bien caliente a nuestro arroz y dejamos hervir a fuego medio. Cuando el caldo se evapore, añadimos un par de cazos más, y así sucesivamente hasta que el arroz esté cocido.
8. Una vez apagado el fuego añadimos una nuez de mantequilla y un buen puñado de queso parmesano rallado, lo mezclamos todo bien y ya podemos servir.

Buon appetito!!